Me llamo Ainhoa, os quiero contar a grandes rasgos mi historia con la terapia de imposición de manos o más conocida como Reiki.
Siempre he sido habitual o recurrente en terapias naturales. Me encantaba la sensación que el Reiki me hacía sentir, ese calor de las manos del terapeuta o ese sentimiento de bienestar y calma al terminar la sesión, que me pedía «a gritos» mi cama y mi edredón para culminar el tratamiento (estoy exagerando esa voz sólo lo sugería…)
Hace un año, mi interés y curiosidad fue mayor, me inició mi maestra y queridísima amiga con el nivel IReiki (abre los canales de energía a nivel del cuerpo fisico) Usui Reiki Ryoho, donde descubrí los chrakras y el significado real de energía y bienestar. Cabe decir, que los cinco principios del Reiki me terminaron de enamorar:
1. Sólo por hoy, no te enfades.
2. Sólo por hoy, no te preocupes.
3. Sólo por hoy, sé agradecido.
4. Sólo por hoy, trabaja honestamente.
5. Sólo por hoy, sé amable.
Cada persona tenemos siete chrakras principales:
1. Base (base de la columna)
2. Sacral (abdomen)
3. Plexo solar (justo debajo de la caja torácica)
4. Corazón
5. Garganta
6. Tercer ojo (frente, entre las cejas)
7. Corona (parte superior de la cabeza)
Una vez que te inician en Reiki, debemos pasar un periodo de depuración de tres semanas en el que puedes tener sensaciones muy variadas. Os cuento mi experiencia con él autotratamiento en el nivel I que se dilató un poco… Ya que se convirtieron en casi 50 días, porque,
o bien acababa durmiéndome (que fue bastante habitual …) y claro, ese día no contaba; o, porque hacía el refrán a la inversa «no dejes para mañana lo que puedas hacer hoy…» También, tengo que decir que no sabía muy bien lo que conllevaba todo esto. En cuanto a sensaciones, los primeros siete días o incluso diez note en el chakra corazón ansiedad y agobio e incluso unas leves taquicardias, pero esa emoción derivó en paz, mucho positivismo y bienestar. Otra zona donde sentí mucho fue en el tercer ojo, al principio notaba pequeños mareos al acabar el auto tratamiento; en el chakra sacral tuve molestias, como nauseas pero por las malas digestiones que tenía. Al finalizar mi autotramiento la sensación de bienestar fue genial. Con el nivel I recibes el primer símbolo de Reiki «símbolo de poder y fuerza» CHOKUREY. Qué se utiliza al principio de la sesión, para sellar y proteger. Un dato curioso, lo uso para protegerme al conducir yo lo utilizo también para encontrar aparcamiento y os aseguro que funciona, si mi mente está serena y clara.
Hace cuatro meses, más o menos, mi cuerpo me pedía el nivel II, este grado llega a un plano más emocional. Recibí tres símbolos de Reiki tales como el SHEIHEKI (curación mental y emocional), HON SHA ZE SHO NEN (símbolo a distancia) y el ANTAHKARANA (símbolo para la meditación y sanacion)
Y, por supuesto, tienes que hacer tus 21 días de autotramiento. Que tengo que decir, que esta vez sí que fueron los días determinados. Era plenamente consciente de todo lo que conllevaba Reiki. Tuve unas sensaciones diferentes como altibajos emocionales, sueños extraños.
Soy una persona impetuosa y demasiado auto exigente, Reiki me está enseñando a relajarme a no querer los resultados para ayer y sobre todo a ser más feliz, positiva y agradecida.
Por último, y sin que se me olvide, cada nivel necesita 21 días de autotratamiento, y que los beneficios del Reiki no van a venir por arte de magia, hay que trabajárselo sino todos los días la mayoría. Particularmente, antes de dormir necesito nivelarme chrakras para culminar mi día.
Sin más, me despido espero que esta pequeña reseña os haya gustado.
Ainhoa
